Romanos 8—16
Esta inspirada epístola a los cristianos de Roma explica que la salvación no viene por la obediencia a la ley de Moisés ni por mérito ni bondad personal. Pablo explicó que cualquiera puede ser salvo —sin embargo, únicamente por la gracia de Dios cuando es derramada sobre los que le obedecen y viven por fe. Este mensaje, tan esencial para las personas hoy, es examinada con cuidado por David L. Roper y presentada utilizando un enfoque que facilita entenderla y compartirla con los demás.